LA SITUACIÓN DE LAS PENSIONES EN
ALEMANIA
La ley de fondos de pensiones del seguro es y
sigue siendo el pilar de mayor importancia en la previsión para las personas
mayores en Alemania.
Todos los trabajadores cotizan mensualmente en
distintos fondos de pensiones tales como la Oficina regional de seguros para los
trabajadores, el Institución federal de seguros para los trabajadores, la
seguridad social para empleados de la mina demás trabajadores del sector
mineros.
Actualmente, la aportación es de 19,5% del
salario bruto y se espera que incremente hasta un 19,9% para enero del
2007.
Tanto los empleados como los empresarios
cotizan.
Los autónomos tales como artesanos, artistas y
profesores de universidad deben tener un seguro obligatorio según lo establecido
por ley o aportar una previsión individual.
Los funcionarios reciben sus pensiones del
fondo público.
Las pensiones son pagos vinculados a las
cotizaciones previas calculadas en función del ratio del número de
contribuyentes por años en el que se incluyen a los aprendices, las bajas por
paternidad y los desempleados.
Las pensiones son principalmente dinámicas
puesto que forman parte de la economía del desarrollo del país. Gracias a los
propios esfuerzos y al apoyo mutuo de generaciones comunes de todas las personas
aseguradas, empresarios y pensionistas ofrecen protección, seguridad y
viabilidad financiera.
Después de 15 años de revisión, las
instituciones para las pensiones comienzan a analizan las pensiones actuales.
Con la actual jubilación obligatoria a los 65 años, un pensionista recibe
aproximadamente el 65% de su último salario neto, esto representa, hoy en día,
una media de 1082 Euros.
Todas las pensiones están sujetos a
reducciones por asistencia médica y cuidados sanitarios que deben abonarse
mediante cotizaciones a partir de una renta anual de 19.000
€.
Los empleados de la función pública reciben
una pensión adicional del fondo complementario de pensiones. Así como algunas
grandes compañías pagan a sus empleados una pensión operativa
adicional.
El sistema alemán de pensiones se basa en el
hecho de que la generación de trabajadores en activo contribuya en las
pensiones de las personas de la tercera edad. Por consiguiente, este
sistema compartido también se llama generación de contrato. Debido a que este
contrato se ve amenazado, las pensiones no están vinculadas con el aumento del
IPC sobre los sueldos y los salarios desde hace dos años y, además, se esperan
más congelaciones salariales.
A partir del 2010 los fondos de pensiones se
verán amenazados por la baja natalidad, visto que el número de pensionistas
aumenta mientras que el número de niños baja. ¿Cómo podrán los jóvenes hacer
frente a la carga de las generaciones de los mayores? Actualmente, el subsidio
de los fondos de pensiones es el factor de mayor coste.
Por esta razón, se interpone el Estado como
legislador: las pensiones públicas deben complementarse por alguna previsión
privada que el Estado apoya mediante reducción de impuestos y subsidio por
hijos. Las pensiones Riester (muy atractiva para familias con hijos) y Rürup
(favorece a los autónomos y a los freelances) forman parte de esta
previsión fundamental, así como los seguros directos, fondos de pensiones y
pensiones privadas de empleo.
Las aportaciones a los planes de pensión están
libres de impuestos y de cotización a la seguridad social. Por consiguiente, al
retirar el dinero a la edad de jubilación se deberá pagar los impuestos con el
tipo impositivo individual.
Desgraciadamente, la mayoría de los alemanes
se burlan acerca de su futura pensión. Aproximadamente una tercera parte de la
población activa no tiene planes privados de jubilación y por consiguiente
entrarán de lleno en la pobreza cuando lleguen a la edad de
jubilación.
Para frenar la presión del gasto de los fondos
de pensión, la edad de jubilación obligatoria pasará poco a poco de los 65 hasta
los 67 años, desde el 2012 hasta llegar al 2035. La ley tiene que entrar en
vigor a principios de 2007. La pensión de los que soliciten la jubilación
anticipada se verá afectada en un 0,3% por año. Las personas que hayan cotizado
durante 45 años podrán jubilarse a los 65 años manteniendo su pensión
íntegra.
Este proyecto de ley provoca fuertes
discusiones entre los partidos, entidades económicas, sindicatos, empresarios y
empleados.
Desde hace mucho tiempo, en Alemania, la gente
mayor encuentra muchas dificultades para colocarse en el mercado de trabajo.
Además de esta tensa situación, muchas compañías diseñan planes sociales para
dar de baja anticipadamente a sus empleados mayores.
El porcentaje de todos los trabajados entre 55
y 64 años representa tan solo el 39% de la población activa en
Alemania.
Para concluir, nuestro gobierno debe afrontar
y llevar a cabo las correspondientes reformas que desde hace mucho tiempo están
paralizadas en el sistema de pensiones y en el sistema social. Los Partidos, las
entidades económicas, los empresarios, los sindicatos y los empleados están
invitados a aportar sugerencias al bienestar de las generaciones futuras con el
propósito de acabar de una vez por todas con el negativo desarrollo de la
situación de las pensiones.
Ruth Rebert