Agrupación Europea de Pensionistas de Cajas de Ahorros y Entidades Financieras

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Índice de Documentos > Boletín Euroencuentros > Número 10



PODEMOS considerar RSC como una nueva visión del concepto de empresa que implica no sólo valorar la obtención de beneficios (aunque sin ellos las empresas no pueden sobrevivir), sino valorar básicamente el actuar empresarialmente con responsabilidad social.

 

El Libro Verde de la Comisión Europea manifiesta que la Responsabilidad Social Corporativa se define como “la integración voluntaria, por parte de las empresas, de las preocupaciones sociales y medioambientales en sus operaciones comerciales y sus relaciones con todos sus interlocutores”.

En España, el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, dependiente del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, refiriéndose al concepto de “Empresa Socialmente Responsable” ha dado la siguiente definición: “Organización competitiva en términos económicos, que intenta cumplir de una manera excelente sus cometidos para asegurar siendo tal y asegurar asimismo su supervivencia. Pero ello obviamente no es suficiente, debe dar también respuesta satisfactoria a los siguientes requisitos: ofrecer productos y servicios que respondan a las necesidades de sus usuarios, contribuyendo al bienestar; tener un comportamiento que vaya más allá del cumplimiento de los mínimos reglamentarios, optimizando en forma y contenido la aplicación de todo lo que le es exigible; la ética ha de impregnar todas las decisiones de directivos y personal con mando y formar parte consustancial de la cultura de empresa; las relaciones con los trabajadores han de ser prioritarias, asegurando unas condiciones de trabajo seguras y saludables; han de respetar con esmero el medio ambiente, y ha de integrarse en la comunidad de la que forma parte, respondiendo con la sensibilidad adecuada y las acciones sociales oportunas a las

necesidades planteadas, atendiéndolas de la mejor forma posible y estando en equilibrio sus intereses con los de la sociedad. La acción social de la empresa es importante, pero evidentemente no es el único capítulo de la Responsabilidad Social”.

 

 Para las empresas, la RSC debe ser una decisión estratégica que contemple: Política Integral, Procedimientos y Sistemas, Monitoreo y Métrica, y finalmente una Comunicación Externa con un reporte, un informe para la sociedad en la que desarrolla su función, su actividad, y a la que debe servir. Visto de otra manera también podemos decir que la RSC está relacionada con: Derechos Humanos, Derechos de Medio Ambiente, Convergencia Social y Económica, y con Normas o Estándares Laborales. La sostenibilidad es hoy día un enfoque fundamental para el mundo empresarial, el valor de una empresa no es sólo el valor de sus activos, también tiene que considerarse, y cada vez más, cómo la ven los demás y qué aporta a la sociedad. En la actualidad es vital que las empresas expliquen lo que hacen y lo que aportan como beneficio a la sociedad: hoy se valora tanto lo social como lo estrictamente empresarial y de negocio. La ciudadanía valora actualmente la preocupación social de las empresas y lo que las mismas aportan a la sociedad. Es importante obtener beneficios y con ellos también beneficiar a la sociedad en la que la empresa está arraigada.

 

 

La Responsabilidad Social Corporativa está vinculada directamente al Pacto Mundial de Naciones Unidas relacionado con los DIEZ PRINCIPIOS UNIVERSALES agrupados en los apartados siguientes:

 

DIEZ PRINCIPIOS UNIVERSALES

 

DERECHOS HUMANOS

1. Las empresas deben apoyar y respetar la protección de los derechos humanos fundamentales, reconocidos internacionalmente, dentro de su ámbito de influencia.

2. Las empresas deben asegurarse de que sus empresas no son cómplices en la vulneración de los derechos humanos.

 

NORMAS LABORALES

3. Las empresas deben apoyar la libertad de afiliación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva.

4. Las empresas deben apoyar la eliminación de toda forma de trabajo forzoso o realizado bajo coacción.

5. Las empresas deben apoyar la erradicación del trabajo infantil.

6. Las empresas deben apoyar la abolición de las prácticas de discriminación en el empleo y la ocupación.

MEDIO AMBIENTE 

7. Las empresas deberán mantener un enfoque preventivo que favorezca el medio ambiente.

 

 

 

 

 

 

 

 

8. Las empresas deben fomentar las iniciativas que promuevan una mayor responsabilidad con el medio ambiente.

9. Las empresas deben favorecer el desarrollo y la difusión de las tecnologías respetuosas con el medio ambiente.

ANTICORRUPCIÓN

10. Las empresas deben trabajar contra la corrupción en todas sus formas, incluidas la extorsión y el soborno.

Las Cajas Españolas siempre han respondido al reto de la sociedad complementando subsidiariamente las acciones gubernamentales y de otras instituciones pero eliminando duplicidades. Siempre han actuado con Responsabilidad Social, como no podía ser de otra manera. Mientras que para algunas empresas se trata sólo de una moda del siglo XXI, las Cajas, en España vienen ejerciendo la

RSC desde hace 170 años. En un principio tenían como objetivo “el equilibrar la sociedad y la economía del momento contra la exclusión y usura, ayudando a que se movilizara el ahorro para que se pudiera invertir en proyectos buenos para el país y que tuvieran como resultado la creación de empleo y riqueza, contribuyendo así al progreso económico y social”.

Para las Cajas, la Responsabilidad Social Corporativa comporta:

Buen Gobierno Corporativo, Relaciones Internas y Externas, Efectos

Sociales de la Actividad Financiera, y la propia Obra Social. La sociedad debe saber que las Cajas, desde el punto de vista financiero, son tan competitivas como cualquier empresa de cualquier país, pero que en términos sociales son los mayores inversores. No existen empresas que inviertan tanto en acciones sociales como el conjunto de las Cajas de Ahorros: aproximadamente el 30% de los

beneficios se dedican a proyectos sociales constituidos por: Asistencia Social y Sanitaria, Educación e Investigación, Programas Culturales y de Tiempo Libre, Actuaciones y Programas Medioambientales, Acciones de Rehabilitación del Patrimonio, etc. Las Cajas españolas en el año 2004 destinaron 1.190 millones de euros a la Obra Social, un 14’5% más que en el 2003. Carlos Balado, Director de la Obra Social y Relaciones Institucionales de la Confederación Española

de Cajas de Ahorros (CECA) afirma que: “no se puede entender la actividad empresarial si no es porque existe la Obra Social, y la Obra Social no se puede desarrollar si no tienes una empresa que gana dinero, que hace reservas, que se fortalece y que cada

vez es más solvente”.

Cuando las Cajas dotan fondos para proyectos sociales se implican en los mismos, no se limitan a facilitar dinero para que otros lo administren. Sus programas son a corto, medio y largo plazo, por lo que la dotación se prolonga en el tiempo, es continuada hasta que se cumplen los objetivos fijados. En definitiva, podemos afirmar que es la sociedad en su conjunto la que se beneficia de todas las acciones sociales que emprenden las Cajas.

Las ayudas que las Cajas españolas dan a sus empleados activos, y a los que ya han pasado a la situación de jubilados o pensionistas, facilitándoles locales para sus sedes sociales y subvenciones económicas para su funcionamiento, podemos afirmar con orgullo de pertenencia que son un acto de Responsabilidad Social Corporativa.

 

José Roberto López Martínez

Vicepresidente Ejecutivo de la Agrupación