Agrupación Europea de Pensionistas de Cajas de Ahorros y Entidades Financieras

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Índice de Documentos > Boletín Euroencuentros > Número 6



Hay pocas regiones en Europa que ofrezcan las imágenes de ensueño bajo el sol del mar Mediterráneo que ofrece la región del sur de España. El principal atractivo de este paisaje es el legado que en él han dejado los árabes y los moros. Éstos no sólo le pusieron a Andalucía su nombre (Al-Andalus), sino que durante sus cerca de 700 años de permanente presencia marcaron hasta nuestros días su cultura y civilización. En Andalucía, el flamenco, las corridas de toros y el jerez campan a sus anchas. Además, la Costa del Sol ofrece con sus 322 días de sol al año unas relajantes vacaciones a orillas del mar.

              

Por este motivo, la Asamblea General que se celebra cada año tuvo lugar en ISDABE, la residencia internacional de Estepona-Andalucía donde los empleados de las cajas de ahorros pasan sus vacaciones. A este Euroencuentro, en el soleado mes de mayo, acudieron 406 participantes de España, Portugal, Francia, Bélgica, Italia, Inglaterra, Alemania y, por primera vez, de Suecia. Mediante estas citas anuales podemos informarnos del trabajo realizado por nuestros representantes y enterarnos de cómo van desarrollándose nuestros planes. Para conferir más fuerza a nuestras reivindicaciones, es imprescindible hacer llegar una resolución a la UNESCO en Bruselas, ya que hasta ahora ninguna autoridad se ha preocupado eficazmente de los intereses de los pensionistas.

Todos sabemos que el camino que nos hemos trazado es muy complicado; pero confiamos en que un día lograremos un nivel europeo común. Por eso, intentaremos crear una Europa social desde el más bajo nivel con todas nuestras fuerzas y con una voz uniforme para, de este modo, poder defender los derechos humanos de los pensionistas.

Mientras los miembros del Consejo de Administración estaban reunidos, el Alcalde de Estepona invitó a sus acompañantes a visitar la ciudad. Estepona, una vetusta colonia romana como lo demuestran sus hallazgos arqueológicos, es un típico pueblo costero andaluz. Sus tortuosas callejuelas, sus casas encaladas, adornadas con balcones de forja de hierro y la Plaza de Flores forman el tradicional núcleo del lugar. Las playas son largas y bonitas y la vista alcanza hasta el Peñón de Gibraltar. Visitamos además la plaza de toros con sus museos colindantes y el mercadillo semanal. Como el grupo alemán se quedó una semana más de vacaciones en Estepona, pudo participar en la festividad de San Isidro, el patrón protector de los labradores. Fue una bonita experiencia pasear por los callejones engalanados con palmeras y presenciar la procesión con sus orgullosos jinetes y las bandas de música con sus trajes tradicionales. UNICAJA nos invitó a una excursión de un día a Málaga y a las Cuevas de Nerja. En Málaga estuvimos en la catedral. Su construcción comenzó en el siglo XVI, y sin embargo se prolongó hasta el siglo XVIII. Incluso una de las dos torres, 'La Manquita', está inacabada. La planta de la catedral es gótica y la fachada principal tiene rasgos barrocos. El coro aloja 40 tallas de Pedro de Mena. Los órganos son del siglo XVIII. En el Museo de Artes y Costumbres Populares nos proporcionaron algunas ideas sobre la economía y el modo de vivir tradicionales de la región. Allí estaban representados, entre otros, los gremios de los pescadores, los marineros, los molineros y los viticultores, en sus respectivas salas, con sus herramientas típicas.

Las figurillas de cerámica pintada del primer piso nos muestran escenas de la vida popular. En el idílico patio interior, los representantes de UNICAJA nos obsequiaron con vino de Málaga y tapas y entregaron regalos a los visitantes.

                Por la tarde pasamos con el autobús cerca del Puente de las Águilas, en Maro, cuando íbamos a las famosas Cuevas de Nerja. Esta cueva, descubierta en 1959 por unos niños que estaban jugando, es sin exagerar uno de los monumentos naturales más grandes e importantes del mundo. El tamaño de las salas y sus muy variadas formaciones de estalactitas y estalagmitas ofrecen a quien las visita un espectáculo increíble. Indiscutiblemente el punto culminante de esta cueva es la Sala del Cataclismo, en la que se alza un amasijo de estalactitas y estalagmitas de 60 metros de altura y 18 metros de diámetro. Los adornos de la Sala de los Fantasmas o los de la Sala de la Cascada son también impresionantes. Además, se pueden encontrar pinturas murales y temas de todas las épocas prehistóricas incluidas entre la Edad de Piedra y la Edad del Bronce, que es cuando esta cueva estuvo habitada. Tras este espectáculo sin igual, disfrutamos de una espléndida vista desde el Balcón de Europa en Nerja, un mirador situado por encima del nivel del mar en una de las rocas saledizas de la polifacética costa y con la sierra al fondo.

 

Por la noche asistimos a una actuación de la Escuela de Arte Ecuestre Costa del Sol. El espectáculo de equitación presenta la auténtica tradición del arte ecuestre andaluz. En perfecta forma, las señoritas y los caballeros realizan con gracia y soltura saltos, piruetas y bailes. La coreografía, la música escogida y los coloridos efectos de luz convirtieron el espectáculo en un acontecimiento inolvidable. Un día agotador pero inolvidable también fue el que pasamos en SELWO, un parque de la naturaleza inaugurado en 1999. Allí emprendimos un safari andando, aunque también hicimos una parte en 'jeep'. Es una costosa reserva donde pudimos observar más de 2.000 animales que viven allí en semilibertad. En el Cañón de las Aves contemplamos los diferentes tipos de aves y nos informamos sobre ellos. En la Ruta de la Sabana encontramos antílopes, gacelas, jirafas, cebras y elefantes, y en la Ruta de los Valles, tigres, leones, búfalos y osos. En los lagos retozaban hipopótamos y cocodrilos. Al mediodía comimos en una especie de chozas al aire libre y fuimos sorprendidos por unos 'aborígenes salvajes y enmascarados' que nos aullaron. Por suerte para nosotros, pudimos escapar y volver a ISDABE sanos y salvos.

El señor García, de la agencia de viajes de Caja San Fernando, informó por la tarde a un representante de cada grupo sobre las ofertas que existen para pasar las vacaciones en España y a continuación nos invitó a comer en el 'Cortijo de Cortes', una granja transformada en restaurante. El domingo era día libre. Se ofertaron excursiones a Ronda, Mijas o Gibraltar. El grupo alemán reservó plazas para la de Ronda. Por una carretera llena de curvas, pendientes empinadas, barrancos y cuevas, llegamos al pueblo de montaña. Ronda se encuentra en la húmeda y boscosa región montañosa de la 'Serranía'. La ciudad, construida sobre una meseta a 780 metros de altitud, está dividida en dos por el profundo barranco del Guadalevín. El barranco está atravesado por tres puentes. En el más imponente, el Puente Nuevo, está el camino que conduce al casco antiguo de la ciudad. Por sus tranquilas y estrechas callecitas se llega pronto a la Iglesia de Santa María la Mayor, de 1483, que originariamente fue una mezquita. Su minarete fue transformado en campanario. El sencillo, pero bonito, Ayuntamiento está adornado con una galería muy larga en la planta superior. Desde la Casa del Don Juan Bosco, con sus terrazas, balcones y escaleras decorados con flores, se puede ver sobre las cascadas el magnífico Puente Nuevo y las casas colgadas en la roca.

Sin embargo, es desde el mercadillo desde donde mejor se puede contemplar este paisaje. Desde allí se pueden ver incluso las cimas de la Serranía de Ronda. El puerto de yates de Puerto Banús está al oeste de Marbella. Con sus cerca de 1.000 fondeaderos pasa por ser uno de los símbolos míticos de Marbella. Quien no tenga ni siquiera una barca, aquí puede admirar los yates de lujo de los supermillonarios. Por el muelle discurre el paseo con sus casas blancas de estilo árabe-andaluz en los que se encuentran alojados elegantes cafés, restaurantes donde saborear un delicioso pescado o distinguidas boutiques. La señora Luna nos alegró las tibias noches de primavera en la terraza del complejo turístico con un programa de animación de lujo, que contó con actuaciones musicales, flamencoy danzas populares españolas. Disfrutamos también de las apetitosas tapas y del jerez servido con gran arte.  El señor José Lidón ha conseguido una vez más organizar el Euroencuentro de manera satisfactoria. Los participantes alemanes queremos agradecer la hospitalidad española y la agradable estancia en Arunda con el señor Luis Mesa, además de la excelente organización de las excursiones por parte del señor Antonio Luna. ¡Hasta el año que viene!

 

Ruth Rebert y Christa Saia (Düsseldorf)