Agrupación Europea de Pensionistas de Cajas de Ahorros y Entidades Financieras

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Índice de Documentos > Boletín Euroencuentros > Número 15



El Banco de España ya ha dejado pasar muchas. Después de casi dos años de intentos fallidos por convencer a las Cajas de Ahorros en situación deficitaria a reestructurarse, ha decidido optar por la mano dura. La semana pasada, el Banco Central actuó en calidad de órgano de vigilancia del sector bancario; dato revelado por Caja Sur después de que la Caja de Ahorros rechazara fusionarse para poder salvarse. Ahora, propone endurecer las normas en cuanto a créditos se refiere; una maniobra que podría precipitar el balance de pérdidas hasta tal punto que obligaría a las entidades a afrontar la dura realidad. Las Cajas de Ahorros españolas que no cotizan en bolsa a menudo son controladas por los políticos que no ven con buenos ojos la idea de no tener vigiladas sus arcas. Hasta la fecha, estas entidades se han opuesto a estas fusiones, a pesar de que la oferta de liquidez sea de 99 mil millones de euros por parte del Fondo de reestructuración ordenada bancaria (Frob). Algunos han preferido evitar las condiciones del Frob –un cupón elevado y la obligación de reestructuración-. Pero, con las nuevas normas contables tendrán pocas posibilidades. El Banco de España ha propuesto aumentar los créditos sobre los bienes inmuebles registrados en el balance en más de 2 años con un incremento del 20% al 30%. Según las valoraciones de Iberian Equity, las Cajas de Ahorros que hayan adquirido bienes inmuebles y que sean 2,6 veces superiores a aquellos de los bancos comerciales se resentirán. Iberian calcula que las Cajas de Ahorros tendrán que ahorrar otros 5,5 mil millones de euros contra los 800 mil millones de euros de los otros bancos. Los dos bancos comerciales del país, Santander y BBVA ya han previsto aumentar sus créditos hasta el nuevo nivel requerido. Además, el Banco de España quiere acelerar el balance de pérdidas con el fin de pedir que todos los créditos incobrables se cubran al 100% dentro de un año. Es fácil prever una repentina aceleración de los acuerdos sociales.

Franco Salza - Italia